Qué es la quiropráctica

La Quiropráctica es la ciencia que estudia la relación entre la columna vertebral y el sistema nervioso, para ayudar al buen funcionamiento natural del cuerpo. La formación de los quiroprácticos es universitaria, equivalente a una licenciatura o Máster según las titulaciones actuales en España. La carrera de Quiropráctica tiene una duración de cinco a siete años académicos, lo que equivale a unas 5.500 horas lectivas, cumpliendo con los requisitos de la Organización Mundial de la Salud.

La Organización Mundial de la Salud (O.M.S.) reconoce la Quiropráctica como la tercera profesión sanitaria de atención primaria (después de la medicina convencional y la odontología) con más de 30 millones de pacientes cada año.

“La Quiropráctica es una profesión sanitaria que se ocupa del diagnóstico, tratamiento y prevención de los trastornos del sistema neuromusculoesquelético y de los efectos de éstos en la salud general. Se basa en técnicas manuales, incluyendo ajustes articulares y/o manipulaciones centrándose principalmente en las subluxaciones.” Definición de la Organización Mundial de la Salud, (O.M.S.).

Directrices Sobre Quiropráctica, 2005
La Quiropráctica en España todavía no es profesión sanitaria ni ha sido objeto de regulación, a pesar de estar reconocida como profesión sanitaria por la Organización Mundial de la Salud (O.M.S.) y tener carácter sanitario en la mayoría de los países desarrollados del mundo.

La Quiropráctica se basa en la premisa de que el organismo precisa del correcto funcionamiento del sistema nervioso, y éste depende, entre otras cosas, de una columna vertebral sana.  El cerebro controla la función de cada una de las células, órganos y tejidos del cuerpo mediante el envío y la recepción de información a través del sistema nervioso. La inadecuada posición y movilidad de las vértebras puede provocar la irritación, compresión o pinzamiento de los nervios que emanan desde la médula espinal o el sistema nervioso periférico, alterando la transmisión de esa información. Tradicionalmente, a estos pinzamientos se les ha denominado subluxaciones. Por ello, una vértebra con mecánica incorrecta puede ocasionar problemas en la columna (lumbalgias, cervicalgias, pinzamientos, hernias discales…). Además, una vértebra en mala posición también puede incidir sobre el funcionamiento de los nervios, ocasionando problemas orgánicos o trastornos funcionales como migrañas, vértigos, parestesias, alergias, otitis, asma, trastornos respiratorios, ginecológicos o digestivos.

La práctica profesional del quiropráctico se centra en corregir mediante ajustes vertebrales los desplazamientos de las vértebras o subluxaciones.  Al recobrar la posición de la columna se restituye la movilidad y se evita la irritación del sistema nervioso. 

La quiropráctica está indicada para cualquier persona de cualquier edad y condición física que desee mejorar su calidad de vida y asegurar que su organismo funcione a un nivel óptimo. Aunque la mayoría de usuarios acude por la efectividad frente a los problemas de espalda, cada vez son más las personas que la utilizan por prevención y por disfrutar de una salud global óptima. De hecho, en los últimos años proliferan investigaciones para evaluar su beneficio ante problemas biomecánicos de las extremidades, problemas de la infancia (asma, problemas de audición, otitis, amigdalitis...) trastornos auditivos, visuales, respiratorios o digestivos.

© Copyright 2023 Christian Arriola - All Rights Reserved